En el año 1982, cuando se libraba la guerra por nuestras Islas Malvinas, Argentina recibió corresponsales de muchos medios gráficos mundiales. Las Abuelas – que por aquel entonces todavía realizaban sus rondas alrededor de la Pirámide de Mayo con sus pañuelos blancos- aprovechaban cualquier medio disponible para difundir su lucha.
A Delia, ingeniosa como siempre, se le ocurrió escribir en un pequeño papel la leyenda “LAS MALVINAS SON ARGENTINAS, LOS DESAPARECIDOS TAMBIÉN”. Mientras circulaban, en cada oportunidad
que tenía, mostraba a escondidas el cartelito manuscrito.
Un fotógrafo africano del cual ignoramos su nombre captó esa imagen. Durante muchos años esa foto estuvo perdida hasta que hace unos cuatro años aproximadamente apareció en las redes sociales.
Delia la había olvidado y se sorprendió al reconocerse en esa imagen.
No se sabe donde está el original de esa fotografía pero ella guarda entre sus cosas mas preciadas el cartelito que se transformó en un símbolo.
A Delia, ingeniosa como siempre, se le ocurrió escribir en un pequeño papel la leyenda “LAS MALVINAS SON ARGENTINAS, LOS DESAPARECIDOS TAMBIÉN”. Mientras circulaban, en cada oportunidad
que tenía, mostraba a escondidas el cartelito manuscrito.
Un fotógrafo africano del cual ignoramos su nombre captó esa imagen. Durante muchos años esa foto estuvo perdida hasta que hace unos cuatro años aproximadamente apareció en las redes sociales.
Delia la había olvidado y se sorprendió al reconocerse en esa imagen.
No se sabe donde está el original de esa fotografía pero ella guarda entre sus cosas mas preciadas el cartelito que se transformó en un símbolo.
articipan:
Delia Giovanola (Abuela de Plaza de Mayo)
Silvia Villa de Inveraldi (autora del libro)
Leonardo Fossati (nieto recuperado)
Agustín Cetrángolo (HIJOS)
