La propuesta para desarrollar el taller en nuestra Provincia de Catamarca nos llegó a través del equipo del Centro Cultural Haroldo Conti, al momento de gestionar una de las obras que se encuentra dentro del “Programa Itinerancia”.

Fue una de las primeras actividades que organizamos como Delegación de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural de la Nación. Imaginamos desde un primer momento, que era la oportunidad para articular agenda con las áreas de educación con una propuesta innovadora, dado el abordaje de la temática memoria, verdad y justicia desde el arte. Nos propusimos a través de la propuesta, trabajar con los docentes de diferentes niveles, de las escuelas de gestión municipal.

Lo primero que hicimos fue contactarnos con las Secretarías de Educación de los  tres principales municipios de la provincia: Valle Viejo, San Fernando del Valle de Catamarca y el municipio de Fray Mamerto Esquiú. Tuvimos muy buena recepción, fundamentalmente por parte de los directivos de los establecimientos escolares.

Participé del taller como una docente más.

La sensación todo el tiempo fue “y ahora qué viene!?”, todo me pareció innovador, desestructurante, incluso en algunos momentos emocionante. El hecho de que el Director del CC sea quien en persona haya desarrollado al taller generó también mucha expectativa; habla de la real federalización y democratización de las políticas públicas en DDHH del Estado Nacional.

Pienso en la cantidad de formas en que un docente o cualquier persona puede transmitir y enseñar la memoria para la verdad y la justicia, sin tener que recurrir permanentemente a un relato descriptivo que llega a ser inútil y hasta incluso en algunos casos angustiante.

Significativamente federal y democrática; incentiva el aprendizaje colaborativo, coloca al docente en un nuevo rol en relación a sus alumnos; genera aprendizaje significativo respecto de los hechos más violentos y terribles de nuestra historia, dado que, va y viene, permite la relación con el presente y el futuro.

Lo realizamos las tres personas que conformamos el equipo de la Delegación, junto con los docentes de las escuelas municipales de Fray Mamerto Esquiú, San Fernando del Valle de Catamarca y Fray Mamerto Esquiú.

Desde el primer momento un vínculo excelente; se percibe la calidez humana y el compromiso con lo que hacen desde el inicio de la gestión hasta el  último momento del desarrollo del taller.

Coincido absolutamente, es una actividad que despierta interés y curiosidad por los DDHH y su significancia en la vida de cada uno de nosotros y, por ende, en la convivencia con los demás.

Impecable el desarrollo del taller.

Para nada imaginaba la dinámica de trabajo, mucho menos porque la propuesta venía de un Centro Cultural de la envergadura y con las características del Conti. Fue realmente novedoso.

Innovadora 100%