Un acróstico es un artificio literario, una forma de jugar con las palabras para hacer que el tiempo pase como si pesara menos. Acróstico es la obra que Diego Rosental se inventa cuando despliega el papel con las letras de su nombre que, desde 1984, guarda en el cajón de su mesa de luz. El manuscrito de aquella composición poética es el aliento que lo anima a crear un nuevo artificio, capaz de recortar el tiempo y componer con sus restos una figura que desteje los hilos del recuerdo.
Interpretación: Jimena Pérez Salerno, Diego Rosental.
Asistencia artística: Eugenia Foguel
Asistencia general: Sofía Etcheverry
Diseño de iluminación: Sebastián Francia
Diseño gráfico: Leandro Ibarra
Música: Daniel Bugallo
Dramaturgia: Aldana Cal
Asistencia de dirección y colaboración creativa: Andrés Molina, Roberta Blazquez Caló.
Idea y Dirección General: Diego Rosental